José Miguel Gutiérrez, Cumbia 'e Tu Madre:
Larga Vida a la cumbia chorera
Para la reconocida banda, el año 2024 fue un año fructífero, donde resaltan hitos importantes como el lanzamiento de tres sencillos con sus correspondientes videos Fino Patagón, la cumbia chamamé donde participó Luciano Auad, Luna de Maullín, que contó con la presencia de Efrén Viera, integrante de Inti Illimani, registro realizado en La Makinita y el clip Mambo Loco, con el reconocido actor nacional, Luis Dubbo, quien lució su talento en el Cirus Bar y otras locaciones para dar forma a un video bien logrado.
También tuvieron la oportunidad de llegar con su propuesta, a ciudades como Concepción, Chillán, Talca, Santiago, Valparaíso por el norte y Cochrane, Balmaceda, Coyhaique y Villa O´Higgins, por el extremo sur
Por otra parte, Cumbia ‘e tu Madre estuvo nominada en Mundo Cumbia Awards 2024, como mejor banda regional, certamen que reunió a los connotados de la cumbia chilena. En la ocasión, se quedaron con la segunda posición, tras la Sonora Barón de Valparaíso.
Era competir en desventaja porque, si bien es cierto, la agrupación porteña es de una región, su cercanía geográfica con Santiago, le otorga condiciones favorables para alcanzar mayor visibilidad.
“Fue ingrato, pero les dije a los demás integrantes, que había una trayectoria de la sonora que valorar, mientras nosotros recién sumamos 15 años a la escena musical. Hay que ir paso a paso y seguir trabajando”. Comenta con la sinceridad que le caracteriza.
“Ya vendrá el momento de soñar en grande como el Festival del Huaso de Olmué, un evento televisado importante. La cumbia tiene un espació y es en Olmué. Lo tenemos como un objetivo de trabajo”.
¿Por qué Cumbia ‘e tu Madre aún no ha llegado a escenarios mayores?
“Porque somos del sur y la mayoría de nosotros hemos echado raíces aquí, tenemos nuestras familias. La mayoría de los integrantes son profesores de música que ejercen la docencia, o tienen más de un trabajo, porque para vivir cien por ciento de la música, hay que ponerle”. Explica.
José Miguel, ha podido hacerlo cantando diferentes estilos, cumbia, baladas y rock, en formato solista, trío o banda, lo que le permite llegar a distintos públicos y locales. Además de ejercer en varias otras ramas de la música como tallerista o instrumentista, en cócteles, matrimonios u otros eventos.
“La música no se termina nunca. Cuando descubrí que lo mío era la música, estudié guitarra clásica, pero me di cuenta que requería muchísimo estudio, pero el canto ya me había atrapado. Para vivir de la música debía ser lo más parecido a un cantante. Para mí, la vida está hecha de oportunidades, si me llaman para tocar flauta traversa, yo voy.
“Cuando comencé en la música estaba sonando mucho Marc Anthony con su onda salsera y canté esas canciones. No discrimino, porque para mí es una filosofía de vida, todo lo veo como música, porque cantar es vibrar y es un momento mágico”.Reflexiona, desde su acogedora casa en Osorno, la que según sostiene, “es la ciudad más piola del sur de Chile”.
Recuerda su iniciación en el rock, cantando La Leyenda del Hada y el Mago, de Rata Blanca, una canción complicada, que exige mucho rango vocal, especialmente de las tonalidades agudas. Ensayó hasta dar con su propia versión.
Estrena constantemente su voz para interpretar cumbias, baladas, rock o cuecas. Conoce trucos y técnicas para cuidar sus cuerdas vocales.
“Es como el vendedor de la feria, que sabe cómo impostar de su voz”.
Recuerda, con aire de ternura, su pasada por el programa Chile País de Talentos, donde en uno de los registros, hace más de dieciséis años, se le puede ver con su típica melena risada versionando Dust in the Wind y acompañándose de flauta traversa.
“La exposición que da la tele, marcó indudablemente un antes y un después para mí. Mucha gente me conoció allí y desde entonces han acompañado y están atento a mi carrera.
He vivido el feedback y es de cariño, por todo lo que he podido realizar con cariño y pasión, a pesar de que el ego y la fama está presente se ha convertido en algo verídico y honesto y lo compruebo, en el amor y afecto del público cuando nos va a ver.”
Vuelve a su zona de confort, ese lugar donde reina la cumbia, para referirse a la sonoridad que caracteriza a su banda.
Consultado sobre qué elementos distinguen a la agrupación enraizada con Puerto Montt, contextualizamos con otros conjuntos tropicales, como La Sonora Palacios o la Sonora de Tommy Rey o Los Viking´s 5, con un sello sonoro carente de instrumentos de bronces, lo cual, lejos de restarle impronta cumbiera, los ha posicionado como inconfundibles e imperdibles en todo tipo de fiestas.
“Los Viking´s 5 destacan porque vienen de una cuestión más rockera, como de la cumbia chicha, sicodélica y amazónica de Perú, que era el pedal de guitarra llamado delay que le da un rebote particular. Los arreglos melódicos del bloque de bronces son reemplazados por los de la guitarra, que dan ganas de bailar inmediatamente”.
En la banda de Gutiérrez, integrada por diez músicos más, es el fuelle sonoro del acordeón el que establece esta denominación de origen, que determina la musicalidad auténtica que nació junto a curantos y palafitos de Angelmó.
“Esto lo hemos hablado al interior de la banda. El acordeón está incorporado como elemento chilote, más sureño también con elementos de chamamé, vals, corridos campesinos y la cumbia. Juan “Pitufo” Silva, es un estudioso de su instrumento musical, porque viene de una familia de folkloristas y cultores de estas tradiciones de Maullín. Él tiene una formación que lo respalda, y lo aporta impregnando el toque preciso según lo requiera la canción”.
Va más allá de este punto cuando resaltamos que, por momentos, el acordeón suena a vallenato, como si fuese un tema de Carlos Vives.
"Es que está todo conectado. Latinoamérica es riquísima en música, deberíamos sentirnos orgullosos. Hoy, cuando hay mayor nivel de xenofobia con los migrantes que vienen a Chile a buscar oportunidades. Esto ha pasado siempre.” Señala al abordar la influencia de personas que provienen de otras latitudes.
"Hay más chilenos por el mundo, que chilenos aquí en Chile. La multiculturalidad ayuda mucho al país, lo hace más alegre, porque somos más apagados. Sólo celebramos y nos sentimos chilenos en algunas fechas, deberíamos tener ese espíritu de fiesta todo el año”. Asevera.
La cumbia da para todo y para todos. Le consultamos su opinión y cómo relaciona la cumbia chorera con la cumbia ranchera.
“Está bien. La cumbia ranchera tiene su sitio. No soy una persona que escuche mucho este estilo, pero la toco en bares y otros lugares, porque ya es un repertorio y llegó para quedarse. Ellos -los exponentes de esta corriente - la rompen todos lados. Aunque es muy monótona, como el reguetón. Después de 3 ó 4 canciones, es como si ya hubiera oído todo”.
Ante esto, se declara orgulloso de “mi bandita, porque tocamos varios estilos, chilombiana, peruana, argentina, algo de chamamé. Nunca se aburrirán porque no es un show plano con repertorio limitado, y eso es por la calidad de los músicos. Siento que vamos a terminar como el grupo Congreso, vamos a terminar haciendo cumbia jazz”. Sonríe un poco en broma, mas también en serio, con claridad y convicción por la apuesta que han estructurado a lo largo de su trayectoria.
Bautizada así por el productor del primer disco, el concepto de cumbia chorera surgió en medio de debates, que buscaba definir cuál sería la estampa y el discurso que acuñaría la banda.
“Almejas, choros, milcaos… Ya ahí está: choreros. Coincidieron, en democrática asamblea, para establecer la genética de una expresión, también usada por ejemplo en Talcahuano, como en casi todas las caletas de Chile.”
Este puertomontino, por adopción, reconoce, tal como lo hizo en una entrevista del medio digital La Junta Plus, estar en deuda con una cumbia dedicada al club de Deportes Puerto Montt. Y es que la cumbia, es tan amplia y transversal, que ni el fútbol se salva. Así quedó demostrado con la canción "La mano de Dios" creada por Alejandro Romero y popularizada por Rodrigo, su cuñado Rodrigo, con ese himno futbolero de comienzos del año dos mil. O los, también trasandinos, Los Palmeras con su homenaje al club Colón de Santa Fe, Yo soy Sabalero. Más cerca, en la región de la Araucanía, Juanjo Montecinos dedicó Temuco está de Vuelta, un contagioso ska, al equipo de sus amores. Sin esquivar, Gutiérrez responde.
“Es algo que está al debe, pero está dentro de nuestros proyectos para el presente año. Porque queremos lanzar un single cada dos meses idealmente, para participar en los premios Pulsar, porque es la exigencia para postular. Estamos en ese plan. Dentro de esos posibles singles, aún estamos definiendo si haremos una cumbia para Puerto Montt, para Deportes Puerto Montt o una cumbia generalizada para el fútbol para que un hincha de cualquier equipo pueda escucharla, cantarla y bailarla. ¡Somos quince personas tomando esa decisión! Yo hubiera hecho la canción y la llevo no más. Pero en este proceso interno hay mucho de conversar. No hemos fallado en el intento, siempre hemos tomado buenas decisiones”.
Sobre lo nuevo de la banda, anticipa y en exclusiva a Milkaos, que “Vamos a lanzar en la radio Corazón”, -emisora donde es frecuente escuchar a la agrupación- “un single que se llama Por Ti”.
También anuncia una colaboración con la cantante iquiqueña Bárbara Muñoz, como parte de la estrategia y plan de medios que mantiene el foco en seguirlos proyectando más allá de la región de Los Lagos, para alcanzar el extremo norte.
Tras la presencia en Mundo Cumbia, el líder chorero vaticina otras ideas, como hacer otros trabajos colaborativos con Zúmbale Primo o Santa Feria.
La digitalización de medios ha repercutido en que, por ejemplo, ya no se vendan CD´s, mermando los ingresos de los músicos, grupos o solistas. Las creaciones deben subirse a plataformas gratuitas como Youtube o Spotify, vitrinas virtuales que sirven para promocionar y atraer público a recitales, conciertos o eventos. A no mediar que se alcance un hit y las reproducciones sean cientos de miles que moneticen el trabajo. ¿Cómo ha estado la agenda de contrataciones esta temporada?
“Si bien es cierto, este año las contrataciones han corrido más por cuenta de productoras independientes u otras organizaciones, y no tanto de parte de las municipalidades. Los cambios de nuevas autoridades municipales, ha implicado una baja, afectando a todos los artistas locales en general. Pero hemos mantenido una demanda favorable hacia nuestro trabajo. Los Cumbia ‘e Tu Madre no tienen por qué estar en todas”. Se resigna. Al mismo tiempo, critica frontalmente las nuevas directrices artísticas y culturales del municipio puertomontino.
"No comparto el que hayan cambiado el nombre del festival. Pienso que Sentados Frente al Mar estaba perfecto, la gente ya lo asociaba a la ciudad. Otras municipalidades como San Bernardo han mantenido sus marcas para este tipo de eventos. Tienen un movimiento cultural permanente. Esperamos que haya una mejor lectura en este sentido.”
Se apagan los micrófonos y las cámaras. Termina la entrevista y para nuestra sorpresa es él quien nos agradece. Así es José Miguel Gutiérrez. Afable y con una humildad ubicada en las antípodas de la vanidad y el ego. Allí donde no suena la cumbia chorera, de la buena.
Cumbia ‘E Tu Madre son: Voz: José Miguel Gutiérrez; Guitarra: Hernán “Gato” Lemus: Acordeón: Juan “Pitufo” Silva; Bajo Eléctrico: Angelo Macías; Batería: Pedro Negrón; Congas: Benjamin "El Diablo" Soto; Teclados: Claudio "Ña" Soto; Trombón: Diego "Carita" Villarroel; Saxofón: Nicolás Vargas Gómez; Trompeta: Felipe “Castaña” Cadagán El trabajo creativo corre por cuenta de él, Hernán “Gato” Lemus y Juan “Pitufo” Silva y quien tiene a cargo los arreglos finales es Felipe “Castaña” Cadagán Sonido: Alex "Titino" Barrientos y Aldo Sejas; Diseño gráfico y Audiovisual: Franco Moraga; Manager y Contrataciones: Diego Silva
